Una invitación semanal a darse un espacio para leer un trozo del evangelio y compartir una reflexión sencilla a partir de nuestras experiencias de la vida diaria.
Caminando Juntos
Cartillas de Reflexión
Un espacio abierto e interactivo, que pretende enriquecer a un número creciente de personas, especialmente quienes buscan respuestas para sus inquietudes espirituales.
19 Abr 19
Juan 13, 1 – 5
Los amó hasta el extremo
«Antes de la fiesta de la Pascua, sabiendo Jesús que había llegado su hora de pasar de este mundo al Padre, habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo. Durante la cena, cuando ya el diablo había puesto en el corazón a Judas Iscariote, hijo de Simón, el propósito de entregarle, sabiendo que el Padre le había puesto todo en sus manos y que había salido de Dios y a Dios volvía, se levanta de la mesa, se quita sus vestidos y, tomando una toalla, se la ciñó. Luego echa agua en un lebrillo y se puso a lavar los pies de los discípulos y a secárselos con la toalla con que estaba ceñido.»
Semana Santa para mí siempre es sinónimo de amor, aunque muchas personas no creyentes piensen lo contrario, que es un fin de semana muy sufrido para los católicos. ¿Porque guardamos el Viernes Santo? me preguntan muchos, incluidos nuestros hijos, ese día. La respuesta es la misma: lo guardo por amor al que nos amó más.
No me veo celebrando una fiesta en la misma fecha que partió mi amado nieto Emiliano a sus casi dos añitos, y tampoco me veo de celebración para Viernes Santo. Mas bien me gusta reflexionar sobre el amor, sobre cómo me he portado en relación a mis semejantes, si he escuchado a Jesús un poco más desde mi corazón…
Entre las palabras más hermosas del Evangelio deben estar las citadas en este pasaje que hoy comento, y es cuando el relator dice “los amó hasta el extremo”.
Como retumba en mi corazón lo de amar hasta el extremo…los padres podemos tal vez sentir un poco así, los enamorados quizás. Saber que Dios, con su infinita grandeza, decidió hacerse ínfimo y nacer hombre (sinónimo de raza humana), para vivir como nosotros, sentir como nosotros, sufrir como nosotros, por puro amor, para redimirnos, me emociona hasta el fondo de mi corazón.
Que tranquilidad sientes en el alma al saberte amada, tal como eres. Difícil explicar para quien no cree, pero tan certero para aquel que tiene una fe madura y renovada.
Es cierto que la estructura jerárquica de la Iglesia, durante siglos, quiso mostrar a Dios como un ser lejano que nos controla y nos condena, pero si escuchamos con atención a Jesús – cuyo mensaje nos hace diferentes desde su llegada – podemos vislumbrar a Dios como el padre del hijo pródigo, que perdona, que pasa por alto nuestras debilidades, que nos ama SIEMPRE. Eso es amor verdadero…
Jesús continuamente dice que El ha venido a mostrar al Padre, que todo lo que hace, lo que dice, lo que piensa es por el Padre. Y Jesús en todo momento, es amor.
Por eso durante el Viernes Santo me doy unos momentos para pensar más intensamente en el amor, en los que amo y también en los que no logro amar, ya sea por indiferencia, por diferencias o por falta de perdón. Y me preparo para la gran celebración de la Resurrección, divino momento donde Nuestro Señor vuelve a Dios y nos muestra cómo puede vencer todo, incluso la muerte.
Semana Santa nos invita a vivir un proceso de amor, que ojala pudiéramos rememorar muchas veces durante el año, puesto que nos muestra los grandes dones y virtudes que podemos cultivar, como la humildad del Cristo para lavar pies sucios, la fortaleza para soportar las injusticias de la vida, la confianza de que lo que viene de Dios es bueno aunque no lo parezca, de la capacidad de protegernos de mal, que esta presente incluso en la mesa del Señor, de la fe que lo hizo entregarse por nosotros y del amor maravilloso de Dios, que esta en nuestro corazón y podemos (y debemos) derramar sin medida.
En Semana Santa es cuando más me pregunto que sería del mundo si nos amaramos hasta el extremo y en la Resurrección vuelve a nacer en mi el propósito de seguir escuchando a Jesús…¡¡¡ que todos tengan un hermoso tiempo de Pascua¡¡¡¡
Llegué al jueves santo como quien regresa del desierto….. entré al templo ….y al dar los primeros pasos me encontré con la maravilla…