Una invitación semanal a darse un espacio para leer un trozo del evangelio y compartir una reflexión sencilla a partir de nuestras experiencias de la vida diaria.
Caminando Juntos
Cartillas de Reflexión
Un espacio abierto e interactivo, que pretende enriquecer a un número creciente de personas, especialmente quienes buscan respuestas para sus inquietudes espirituales.
10 Oct 20
Lucas 11, 1-4
Señor, enséñanos a orar
Una vez estaba Jesús orando en cierto lugar. Cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: «Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó a sus discípulos,» Él les dijo: «Cuando oréis decid: «Padre, santificado sea tu nombre, venga tu reino, danos cada día el pan que nos corresponde, perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todo el que nos debe algo, y no nos dejes caer en la tentación.»
Este texto ha sido modificado innumerables veces, dependiendo de la visión cristiana de quienes se reúnen a orar. A veces utilizamos el término «ofensas» porque «deudores nos resulta demasiado economicista. Sin embargo es la oración que aprendemos en primer lugar.
En ciertos ambientes católicos se comience por el Ave María, entronizada como madre protectora que nos acoge con su comprensión. En ciertos casos, cuando la aflicción nos supera, recurrimos a las reliquias de santos para que obren milagros.
Tal fue el caso mío, cuando mi hermana mayor, a los 21 años, agonizaba a causa de una poliomielitis contraída por antes de conocerse la vacuna. Acudí a mi antiguo colegio, buscando reliquias de la madre fundadora de la congregación, que mediante un milagro vería avanzado el tema de su beatificación como santa. Me cuesta entender que todavía se necesiten milagros para este tipo para trámites.
En estos años del Covid, ¿cuántas personas no cifrarán sus esperanzas en el pronto descubrimiento de una vacuna salvadora?
Deja una respuesta