Una invitación semanal a darse un espacio para leer un trozo del evangelio y compartir una reflexión sencilla a partir de nuestras experiencias de la vida diaria.
Caminando Juntos
Cartillas de Reflexión
Un espacio abierto e interactivo, que pretende enriquecer a un número creciente de personas, especialmente quienes buscan respuestas para sus inquietudes espirituales.
28 Nov 20
Lucas 21, 12-19
Todos os odiarán por causa mía, pero ni un cabello de vuestra cabeza se perderá
Pero, antes de todo esto, os echarán mano y os perseguirán, os entregarán a las sinagogas y cárceles y os llevarán ante reyes y gobernadores por mi nombre; esto os sucederá para que deis testimonio. Proponed, pues, en vuestro corazón no preparar la defensa, porque yo os daré una elocuencia y una sabiduría a la que no podrán resistir ni contradecir todos vuestros adversarios. Seréis entregados por padres, hermanos, parientes y amigos, y matarán a algunos de vosotros. Todos os odiarán por causa de mi nombre. Pero no perecerá ni un cabello de vuestra cabeza. Con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas.
Este tremendo anuncio aparece en los cuatro Evangelios y en los Hechos de los Apóstoles. Evidentemente el anunciar el reino de Dios, la entrega por los pobres, causa mucho dolor y sufrimiento. Esa persecución anunciada por vivir el evangelio, ocurre desde la época de Jesús y vimos cómo lo maltrataron a Él. Luego a los apósotles y a tantos mártires… Pero Él nos consuela indicando que “no moveran ni un pelo de nuestra cabeza”. Tremendo, ¿verdad? Y así y todo tenemos que seguir anunciando el Reino, su mandato, el amor al prójimo como a uno mismo.
Ël vino a traer la Buena Nueva, especialmente a los pobres, y así tenemos que hacerlo nosotros. Aunque tal vez ahora no nos maten o torturen por ello, como en aquellos tiempos, aunque con muchas dictaduras, sí ha ocurrido mucho de eso en el reciente pasado, acabamos de celebrar 31 años del asesinato de los mártires de la UCA, los Jesuitas de El Salvador que no le gustaban a los políticos de aquellos tiempos por sus denuncias contra las injusticias. Y hasta hoy en muchas partes siguen recriminando y acusando a muchos de los que luchan por los pobres, pero nosotros tenemos el deber de seguir anunciado aquel Reino.
Incluso en nuestros días, algunos, incluso Obispos y altos jerarcas, lo critican y demonizan al propio Papa por su Preferencia por los Pobres y sus escritos. Recientemente el ex – Nuncio Apostólico en Estado Unidos le escribe a Trump denunciando la última Encíclica, Fratelli Tutti, por estas sus inclinaciones sociales y por hablar de los pobres y la justicia social necesaria.
Así que tenemos que estar muy claros de la situación, de esta persecución aún en nuestros días y de gente muy cercana, de la propia familia, incluso, como dice el evangelio, y aún con críticas al máximo representante de Nuestra Iglesia. Sigamos con nuestro anuncio y tengamos Fé, como dice el Evangelio, que el Espítiu se mantendrá con nosotros.
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