Una invitación semanal a darse un espacio para leer un trozo del evangelio y compartir una reflexión sencilla a partir de nuestras experiencias de la vida diaria.
Caminando Juntos
Cartillas de Reflexión
Un espacio abierto e interactivo, que pretende enriquecer a un número creciente de personas, especialmente quienes buscan respuestas para sus inquietudes espirituales.
26 Sep 14
Lucas 9, 18-22
“Tú eres el Mesías de Dios. El Hijo del hombre que tiene que padecer mucho”
“Una vez que Jesús estaba orando solo, en presencia de sus discípulos, les preguntó: ¿Quién dice la gente que soy yo? Ellos contestaron: Unos que Juan el Bautista, otros que Elías, otros dicen que ha vuelto a la vida uno de los antiguos profetas. Él les preguntó: Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo? Pedro tomó la palabra y dijo: El Mesías de Dios. Él les prohibió terminantemente decírselo a nadie. Y añadió: El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y letrados, ser ejecutado y resucitar al tercer día”.
En una entrevista imaginaria ¿qué respondería Jesús hoy a la pregunta: “Para ti, ¿quién soy Yo?”
• Ya sé que para muchos hombres y mujeres, Yo soy… mejor dicho, no soy, no existo o, al menos, ellos y ellas actúan como si Yo no existiera…
• Ya sé que para el teatro y la televisión soy una «superestrella».
• Ya sé que en muchos lugares soy un solemne desconocido.
• Ya sé que, según cualquier Constitución no tengo acta de nacimiento, ni credencial de elector… ni vela en ningún entierro.
Pero lo que hoy me importa mucho es saber quién soy Yo para ti:
• ¿Un simple conocido de la infancia?
• ¿Un clavo ardiendo del cual agarrarse cuando los problemas aprietan?
• ¿Un verdadero amigo, en las buenas y las malas?
• ¿Una mera costumbre dominical?
• ¿Alguien por el cual y, claro, con el cual, vale la pena cambiar de vida?
• ¿Alguien digno de imitación práctica: en la casa, en el trabajo, en la sociedad?
• ¿Alguien que puede darle un sentido a tu vida?
Pero, dime sinceramente, para ti: ¿quién soy Yo en la realidad cotidiana de tu vida?
Las preguntas de Jesús a sus apóstoles ¿“Quién dice la gente que soy yo”? y “y, ustedes, ¿quién dicen que soy yo”? me hacen pensar en que quizás debido al exceso de información al que nos enfrentamos hoy, vivimos un proceso despersonalizante. Muchos saben qué es un Ipad o un IPod, están al tanto del último chisme de la farándula, de los últimos asaltos, de los asesinatos del momento o del puntero del futbol, pero pocos se hacen preguntas fundamentales y un buen número de personas son incapaces de responder sobre quiénes son, para que están en este mundo o quién es Dios
San Lucas en muchas ocasiones presenta a Jesús en oración. En este episodio Jesús hace oración, reflexiona, medita, contempla el plan de Dios para Sí mismo y para la humanidad. Asume este plan y lo comparte. Dialoga con sus amigos, les invita a reflexionar, a que ellos también experimenten el amor de Dios; y luego, les hace a los apóstoles las dos preguntas del texto que comentamos.
Hagámonos nosotros también estas dos preguntas de Jesús. Primero: ¿Quién dice la gente que es Él? Es importante que lo analicemos y hagamos aflorar los sentimientos positivos y negativos que pudiéramos estar guardando en nuestro interior. Reflexionemos, sobre lo que dicen de Jesús, de la Iglesia, de la Virgen María, de los sacerdotes, de los católicos, de nosotros mismos… ¿Qué ideas o sentimientos, genera en nuestro interior lo que te dicen o piensas de Jesús y quienes se relacionan con Él? ¿Ellos nos confunden, nos molestan, nos avergüenzan, nos acobardan, nos alejan? Si entramos en nuestro interior y somos honestos con nosotros mismo, podremos ver que los pensamientos o ideas negativas que tengamos enterradas en nuestro interior, influyen en nuestra forma de ser católico. Abramos nuestros corazones, saquemos todo aquello que nos confunde, duele o daña.
La segunda pregunta Si Jesús se dirigiera a nosotros y nos preguntara: «Pero para ti ¿quién soy Yo?», ¿obtendría la misma respuesta de Pedro? Probablemente diríamos lo que hemos aprendido en el Catecismo. Pero eso no es suficiente. Para que podamos responder a esa pregunta es importante estudiarlo y conocerlo, hacer el camino que hizo Pedro.
El Papa Francisco nos dice “Hay preguntas que no admiten evasivas. En un momento central de la vida cada uno tiene que enfrentarse consigo mismo para hacer luz en su conciencia. Puede ser este el punto de arranque para lograr una vida más serena y comprometida”
.
Pero también debemos nosotros preguntarnos algo trascendente, ¿Quién creemos que es Jesús?, ¿Qué es para nuestra vida?, ¿Jesús nos transforma y nos hace cambiar de actitud?
Frente a estos interrogantes, tenemos que responder sin vacilación o tropiezo al hablar, en la pronunciación o en la elección de las palabras, y lo que más importa es con el testimonio de nuestra vida, a fin de respaldar y hacer creíbles nuestras palabras.
Isabel Margarita Garcés de Wallis
El texto es hermoso y la reflexión maravillosa e importante. Nuestra humanidad esta más preocupada de TENER que SER, es mas importante pasar en los malls y visitar lugares topisímos que compartir amor entre los hermanos dando palabras de aliento, ayudando a llevar cargas que a veces son muy pesadas y compartir momentos gratos, en realidad poner en práctica el mensaje de amor de JESÜS, a nadie le interesa ¿QUIËN es JESÜS, para que? solo se acordaran cuando llegue el momento de la partida .
Para mi personalmente ÉL es todo, es el aire que respiro que me permite vivir, es admirar la naturaleza que nos regaló, es compartir con todos, es ir en ayuda del que lo necesita y Servir, existen varios momentos que me caigo pero me levanto de nuevo. El entregar amor al que lo necesite pero en la verdad, aborrezco la hipocresía y aunque no ame a otro trato en lo posible de ser coherente y relacionarme lo mejor que se pueda
La canción dice ERES TODO PARA MI, eso es JESÜS en mi vida